Las lecciones fueron muy duras. A sus 18 años cayó preso acusado de robo de autos. Hoy Jonathan Eduardo es libre y decidido a tener una reinserción exitosa.
Ha sido difícil encontrar una mano que se le extienda para ayudarlo, pero las ha tenido. En el Centro Penitenciario Preventivo Varonil Norte, Jonathan Eduardo pudo encontrarlas y aprender ahora el oficio que le está brindando una nueva oportunidad con el apoyo de amigos, familiares y autoridades.
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Con unos guantes, una cuerda y unos trapos que le servían como vendas para su protección de los puños para evitar una fractura, Jonathan Eduardo se decidió a entregar su nueva vida al boxeo.
“Estuve encerrado casi ocho años, me faltaron 14 días para tenerlo. Aprendí el arte del boxeo ahí en el Reclusorio Norte. Tenemos mucho tiempo para recapacitar de los errores que hemos tenido”, dijo.
Desde muy chico empecé a drogarme, a cometer muchos errores, hasta que empezamos a robar. Los errores se pagan y desde los 18 años de edad caí en el Reclusorio, donde la vida no es nada sencilla. Allí te das cuenta que puedes salir adelante o bien hundirte por completo
Jonathan señala que gracias al boxeo pudo encontrar su camino. “La verdad, Diosito me está ayudando a recapacitar para ser mejores personas y para llegar a la práctica del boxeo que es el arte que amo y respeto”.
Ahora señala que como entrenador y boxeador profesional está aprendiendo mucho y amigos como Severo Carmona, Pupo Palomares o Maravilla Carmona, lo han pulido al estar intercambiando golpes y seguir mejorando en este arte.
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum Pardo, la Comisión de Box de la Ciudad de México, que preside don Ciro Nucci, y la Unión de Manager, con Ricardo Reyes, son angelitos que nos mandó Dios, además del señor Miguel Gazque, quien siempre ha estado al pie del cañón para atender la necesidad de todos los que nos dedicamos al boxeo, añade.
Ya cometimos muchos errores a pesar del lugar donde estuvimos. Hoy gracias a Dios soy otra persona, con sueños, con metas y sobre todo exponer mi vida como ejemplo para ayudar a los jóvenes que no cometan los mismo errores
El trabajo que realiza la Comisión de Box de la Ciudad de México, que es avalado por la Jefa de Gobierno en los diferentes centros penitenciarios, es digno de resaltar al tener un seguimiento continuo con los jóvenes que se han desarrollado un talento; es por ello, del Torneo Inter Reclusorios Guadalupano, que les da la oportunidad de seguir creciendo.
Tanto el Sistema Penitenciario de la Ciudad de México, de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México, que Instituto de la Juventud de la Ciudad de México, dirigido por la licenciada Beatriz Olivares, Instituto del Deporte de la Ciudad de México, Javier Hidalgo y la H. Comisión, han dado todo el apoyo a los internos para que se desarrollen de manera profesional.
La llegada del licenciado, subsecretario Enrique Serrano Flores ha sido lo mejor para el sistema penitenciario al apoyar enormemente al deporte entre ellos al boxeo.
Jonathan es uno de ellos, quien quiere seguir los pasos del campeón del mundo del CMB y quien también estuvo preso, Julio César “Rey” Martínez.
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Es así que trabajo institucional da grandes resultados y los jóvenes internos lo agradecen. “Yo empecé en mi casa con los movimientos tradicionales del boxeo con sombra, brincar la cuerda y de ahí se me fue acercando la gente para enseñarles y así nací como entrenador”.
Jonathan tendrá su debut el 25 de marzo en la Arena San Juan Pantitlán, donde señala que ahí demostrará que el boxeo es su pasión y la oportunidad para crecer como persona.
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