Humberto Mariles es probablemente una de las figuras olímpicas mexicanas más conocidas de todos los tiempos. Las tres medallas que pudo conseguir en Londres 1948 lo elevan como uno de los pocos aztecas que han logrado obtener más de una presea y el único que logró hacerlo en una misma edición.
Sin embargo, su vida cuenta con una división muy marcada entre el reconocimiento de todo el mundo y los oscuros momentos que atravesó durante sus últimos años de vida, en donde por más que muchos no lo recuerden, pisó la cárcel por varios años.
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Fue un 14 de agosto de 1948 cuando Mariles pudo ganar las tres preseas en distintas pruebas de equitación, pero paradójicamente, fue también un 14 de agosto, pero de 1964, que por una discusión, terminó con la vida de un hombre desarmado después de un altercado vial.
El incidente, aparentemente surgió cuando la víctima comenzó a incomodar al militar que en aparente defensa propia, terminó con la vida del sujeto. Tras ser condenado, permaneció 7 años tras las rejas hasta que en 1971 pudo salir gracias a sus abogados, pero dicha libertad le duraría poco.
Mariles, de nueva cuenta a la cárcel, ahora en París
Ya realizando actividades normales en su vida fuera de la cárcel, un viaje a París para supuestamente comprar unos caballos que el ejército mexicano utilizaría terminó por ser el último error en la vida de Humberto Mariles, luego de ser encontrado culpable de intentar transportar cerca de 60 kilos de heroína.
Encerrado y a la espera de su sentencia, Mariles ni siquiera pudo presentar su declaración de los hechos luego de que sorpresivamente, fuera encontrado muerto al interior de su celda sin alguna razón aparente, luego de que la investigaciones no pudieran encontrar con pruebas sobre un asesinato o en su caso, un suicidio.
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