/ miércoles 21 de agosto de 2019

Toluca mañana reciben al América en la liga femenil

Las jugadoras del Toluca quieren hacer diabluras en la liga mx femenil y van muy bien en este arranque del torneo

Toluca. - Emblemática, grande, única, predominante, así es la leyenda escarlata. Así la describen Karime Abud, Yamanic Martínez y Adriana León. Ellas lo representan, con todo orgullo, en el certamen femenil. En el infierno, caliente a comparación del gélido clima de Toluca, las tres choriceras, de rostros inocentes, son peligrosas en el terreno de juego. Abrieron las puertas del averno, para revelar que pese a sus caritas angelicales se inclinan por las “diabluras” con tal de ser fieles al estilo de la plantilla mexiquense, la cual pide que el “balón siempre ruede a su favor”.

En el centro del campo, en el corazón de la remodelada “Bombonera”, las jugadoras halagaron sus colores. Adriana, la más pequeña, pero con herencia roja, y la que lleva más tiempo en la institución mexiquense, es contundente: “Esto viene de herencia. Desde que tengo memoria siempre he traído en la piel estos colores.

Antes no comprendía por qué cada 15 días era venir aquí y apoyar a este equipo, en lugar de hacer otras cosas, pero hoy agradezco a mi familia, que me inculcó lo que es Toluca, un equipo aguerrido, grande, que pese a no estar en el foco de todos, predomina en toda la extensión de la palabra”, presume la zaguera. Defender desde su trinchera a la oncena de su niñez, es un sueño hecho realidad.

“Para mí ser parte de las toluqueñas es maravilloso. Como ya muchos saben, antes era muy difícil ser tomada en cuenta si eras mayor de edad, por la regla, pero aquí siempre me brindaron esa confianza, apostaron en mí y es algo que nunca olvidaré. Es una de las cosas que más tengo en mi mente, porque el que te abran así los brazos es muy bonito. Te demuestran que ser una Diablita es ser parte de una familia y, para mí, de las mejores”, revela Yamanic, mientras los ojos le brillan en plena entrevista al Diario de los Deportistas. Con una mirada fija, Abud es la siguiente en tomar la palabra: “Aunque he podido militar en otro club, cuando, por fortuna, arribé acá, me di cuenta de que esta institución es fenomenal, en toda la extensión de la palabra. Llegas y te cobijan de manera increíble”, comparte Karime, quien pese a ser procedente de Pumas, habla con pasión del rojo escarlata.

Toluca. - Emblemática, grande, única, predominante, así es la leyenda escarlata. Así la describen Karime Abud, Yamanic Martínez y Adriana León. Ellas lo representan, con todo orgullo, en el certamen femenil. En el infierno, caliente a comparación del gélido clima de Toluca, las tres choriceras, de rostros inocentes, son peligrosas en el terreno de juego. Abrieron las puertas del averno, para revelar que pese a sus caritas angelicales se inclinan por las “diabluras” con tal de ser fieles al estilo de la plantilla mexiquense, la cual pide que el “balón siempre ruede a su favor”.

En el centro del campo, en el corazón de la remodelada “Bombonera”, las jugadoras halagaron sus colores. Adriana, la más pequeña, pero con herencia roja, y la que lleva más tiempo en la institución mexiquense, es contundente: “Esto viene de herencia. Desde que tengo memoria siempre he traído en la piel estos colores.

Antes no comprendía por qué cada 15 días era venir aquí y apoyar a este equipo, en lugar de hacer otras cosas, pero hoy agradezco a mi familia, que me inculcó lo que es Toluca, un equipo aguerrido, grande, que pese a no estar en el foco de todos, predomina en toda la extensión de la palabra”, presume la zaguera. Defender desde su trinchera a la oncena de su niñez, es un sueño hecho realidad.

“Para mí ser parte de las toluqueñas es maravilloso. Como ya muchos saben, antes era muy difícil ser tomada en cuenta si eras mayor de edad, por la regla, pero aquí siempre me brindaron esa confianza, apostaron en mí y es algo que nunca olvidaré. Es una de las cosas que más tengo en mi mente, porque el que te abran así los brazos es muy bonito. Te demuestran que ser una Diablita es ser parte de una familia y, para mí, de las mejores”, revela Yamanic, mientras los ojos le brillan en plena entrevista al Diario de los Deportistas. Con una mirada fija, Abud es la siguiente en tomar la palabra: “Aunque he podido militar en otro club, cuando, por fortuna, arribé acá, me di cuenta de que esta institución es fenomenal, en toda la extensión de la palabra. Llegas y te cobijan de manera increíble”, comparte Karime, quien pese a ser procedente de Pumas, habla con pasión del rojo escarlata.