Fray Tormenta continúa delicado de salud

Uno de sus cachorros señala que el sacerdote agradece las muestras de cariño

Elías Moreno | La Prensa

  · martes 13 de octubre de 2020

Es lucha más importante de Fray Tormenta. A cinco días de haber sido diagnosticado con Covid-19, Fray Tormenta se encuentra grave pero estable, señaló uno de sus “Cachorros” quienes se encuentra al cuidado del luchador y también sacerdote.

“Chico Tormenta” tomó la llamada del Periódico MARCAdor de LA PRENSA, para desmentir los rumores de su muerte al señalar que el padre se encuentra con oxígeno, pero ha respondido muy bien a los medicamentos.

“Es vigilado por dos doctores Benjamín y Ealy además de una enfermera. Ellos nos dan las recomendaciones que debe tener el padre en estos momentos difíciles, pero se encuentra estable”, mencionó el luchador y también abogado.

Chico Tormenta es uno de los cientos de los jóvenes que ayudó el padre Fray Tormenta a salir adelante y ahora es quién se encarga de los cuidados del sacerdote.

Subrayó que el padre se encuentra agradecido por las muestras de cariño que han recibido de las diversas partes del mundo. “Sí tiene oxigeno, pero es en ocasiones no es todo el día. Anoche no pudo dormir debido a los malestares por el covid-19 pero los médicos explicaron que era algo normal”.

Agregó el licenciado en derecho de la Universidad Privada del Estado de México, que Fry Tormenta se encuentra fuerte y luchando día para recuperar su salud que fue deteriorada por el coronavirus.

“El padre ya no tiene su orfanato. Ya no pue atenderlo él quiere seguir, pero su edad ya no le permite muchas cosas y señala que ahora necesita que lo cuiden a él”, manifestó el joven gladiador con una experiencia de cinco años.

Mencionó que luchadores como Shocker, Rey Bucanero han estado al pendiente de la salud de Fray Tormenta además algunas personas de Toluca, Chetumal y Ciudad de México se han encargado de mandar dinero para ayudar al sacerdote.

Chico Tormenta señala que doctores, ingenieros, licenciados, maestros han salido del orfanato y mucho de los llamados “cachorros” se encuentran actualmente al pendiente del sacerdote para regresarle algo del amor que recibieron.