La dinamita que tiene en los puños ha sido su mejor arma para salir avante. Este sábado Edwin “Canito” Cano va en busca de su octavo triunfo como peleador profesional al enfrentar en una pelea de revancha a Misael Saravia en la división de los mosca.
“Estamos listos para conquistar al público de Jilotepec. Hemos tenido una preparación muy fuerte para este pleito que es muy especial. Es un peleador que me conoce y lo conozco y eso lo hace más peligroso”, dijo el peleador nacido en Michoacán, pero radicado en la Ciudad de México.
Con un récord de 8 peleas profesional el también de oficio taquero en la Gorditas Michoacanas Cano en la Colonia Cosmopolita, señaló que estuvo entrenando con su papá Guadalupe Cano y Juan Carlos Barrientos en Querétaro donde pulió mucho su técnica.
“Quiero agradecer a mi papá Guadalupe a mi madre Francisca y mi esposa Nancy, quienes siempre me han apoyado y no me han dejado solo para poder sobresalir en este difícil deporte”, dijo el peleador quien dedicó la pelea a la gente de Epitacio, Michoacán.
Asimismo, “Canito” se siente respaldado con el equipo encabezado por Guadalupe y Francisco, de quienes aprendió mucho en Querétaro al estar trabajando al lado de las jóvenes promesas Juan Carlos “El Inquieto” Barrientos y Jairo “El Dóberman” Bravo.
“Como todo boxeador tenemos el sueño de ser campeones mundiales y para eso estamos trabajando” dijo el peleador.