Luego de la trifulca en el Estadio La Corregidora durante el partido entre Querétaro y Atlas el pasado sábado, nunca antes vista en el futbol mexicano, el Senado de la República invitó al presidente de la Liga MX, Mikel Arriola, a una reunión de trabajo.
El senador Jorge Carlos Ramírez Marín, integrante del grupo parlamentario del Partido Revolucionario Institucional, dijo que no debe quedar impune un acto de tal magnitud y debe castigarse a todos aquellos que participaron.
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Ramírez Marín señaló que con fundamento en lo dispuesto por el artículo 8, numeral 1, fracción ll, del Reglamento del Senado de la República, se invita al presidente ejecutivo de la Liga BBVA MX, Mikel Arriola, a participar en una reunión de trabajo para establecer las medidas que resulten necesarias para evitar la violencia en los estadios de futbol, derivado de los hechos ocurridos el pasado 5 de marzo en Querétaro.
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Asimismo, promoverán las medidas preventivas necesarias para erradicar la violencia, así como la implementación de sanciones a quienes la ejerzan, sin perjuicio de las responsabilidades penales y civiles a que haya lugar, y reducir los riegos de afectación en la práctica de actividades físicas, recreativas o deportivas, y para prevenir y erradicar el uso de sustancias y métodos no reglamentarios que pudieran derivarse del dopaje.
Finalmente, el senador Ramírez Marín aseguró que la reunión de trabajo tiene el fin de establecer las bases generales para la distribución de competencias, la coordinación y colaboración entre las autoridades, así como la participación de los sectores social y privado en esta materia, pues considera que las sanciones no son algo que se deba manejar exclusivamente entre los dueños de los 18 equipos, ya que debe prevalecer la paz antes de cualquier interés.
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