El Centro Deportivo Olímpico Mexicano (CDOM) desde su construcción congregó a lo mejor del deporte mexicano y llegó a tener prestigio internacional gracias al entrenamiento de altura, la revolución en la caminata y las marcas mundiales de la hora logradas por el italiano Franceso Mocer y la francesa Jeanny Longo, así como la pléyade de figuras olímpicas que se prepararon en el inmueble.

A lo largo de 52 años de existencia se convirtió en la catedral del deporte mexicano al ser formador de los deportistas de alto rendimiento en todo este tiempo. Sin embargo, durante los últimos 19 años ha tenido altibajos por falta de presupuesto y la construcción del CNAR en 2006.

En esta ocasión, los diputados no etiquetaron los recursos para este 2019 y la Conade atraviesa por el mismo problema, aunque sí entregó 30 millones de pesos para la preparación de los atletas y cobertura de gastos de los Juegos Panamericanos de Lima que serán inaugurados la semana próxima.

El martes, una comitiva encabezada por el presidente del Comité Olímpico Mexicano se reunió con Esteban Moctezuma para plantear el problema presupuestal que atraviesa el organismo que ha salido adelante gracias a los 20 millones de pesos que entrega el Comité Olímpico Internacional, patrocinios y renta de instalaciones.

Bajo la presencia de Don Mario Vázquez Raña en 1996, año de los Juegos Olímpicos de Atlanta, el CDOM, como ejemplo de su importancia, tuvo a 5 mil 735 usuarios de federaciones; organizó 34 eventos nacionales y 15 internacionales; ese año tuvo a 10 mil 591 usuarios acreditados, se ofrecieron 196 mil 222 alimentos en total y ocuparon la villa 6 mil 972 atletas.