Y no lo perdonaron. El árbitro Fernando Hernández fue castigado 12 partidos luego de propinarle un rodillazo a Lucas Romero, jugador del León, el pasado sábado en el Estadio Azteca.
Por medio de un comunicado y en sus redes sociales oficiales, la Federación Mexicana de Futbol dio a conocer el veredicto de la Comisión Disciplinaria y en la que el más afectado fue el silbante con 12 juegos de suspensión.
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En un principio, los citados fueron los directores técnicos de León y América, Nicolás Larcamón y Fernando “Tano” Ortiz, respectivamente, quienes tendrán que ausentarse del banquillo de las Águilas y La Fiera por dos partidos.
“La Comisión ha decidido sancionar al director técnico del Club América, Fernando Ortiz, y al director técnico del Club León, Nicolás Larcamón, por incurrir en una conducta violenta, con 2 partidos de suspensión respectivamente, los cuales deberán cumplir en los siguientes encuentros inmediatos, correspondientes a cada uno de sus clubes”, se lee en el documento.
El reglamento es muy claro y señala: "Incurrir en cualquier tipo de conducta violenta con los jugadores, integrantes de los cuerpos técnicos, oficiales, con el personal autorizado para permanecer en el terreno de juego y/o el público, 1 a 15 partidos de suspensión y multa de 90 a 500 UMA’s de que la infracción sea cometida en contra de oficiales de partido, se podrá incrementar la sanción”, se menciona.
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El silbante el mismo sábado ofreció disculpas por la acción contra Lucas Romero y que dio la vuelta al mundo calificando como extraño el hecho.
La escuadra de Guanajuato dio a conocer un boletín aceptando las disculpas al señalar: "Fernando: jugadores, cuerpo técnico y directiva del Club León, entendemos la situación. Tienes nuestro respaldo y apoyo como profesional del futbol y padre de familia, a la que le enviamos un cariñoso abrazo. Sigamos trabajando juntos para mejorar este deporte. Ánimo y adelante", informó el equipo.
Pero el arbitro no la libró y le aplicaron 12 juegos de castigo.
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CASTIGO DE RISA
La Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Futbol tenía todo para demostrar que es una verdadera autoridad, pero después del castigo a Fernando Ortiz y Nicolás Larcamón por su pelea en el Estadio Azteca, da risa.
El máximo organismo disciplinario le falló a la FMF al querer terminar con la violencia en los estadios: los entrenadores de León y América son tratados con mano suave y son perdonados, luego de retarse a golpes durante el encuentro de ambas equipos.
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No es posible que mientras al árbitro Fernando Hernández fue castigado con dureza 12 partidos, para los técnicos del América y León fueron sólo dos encuentros.
La Comisión Disciplinaria dio a conocer la resolución en un comunicado… "sancionar al director técnico del Club América, Fernando Ortiz, y al director técnico del Club León, Nicolás Larcamón, por incurrir en una conducta violenta, con 2 partidos de suspensión respectivamente, los cuales deberán cumplir en los siguientes encuentros inmediatos, correspondientes a cada uno de sus clubes".
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