Alan Mozo, lateral titular de los Pumas de la UNAM, fue visto de fiesta consumiendo vasitos de aguardiente y sin observar las medidas sanitarias pertinentes en un restaurante de la Ciudad de México.
Fue la noche del viernes 22 en lo que parecía un cumpleaños, sin guardar la sana distancia en una mesa en la que nadie usaba un cubreboca.
Ya en el pasado mes de agosto el zaguero se reunió en la casa de un jugador del Cruz Azul para asistir a una celebración y días después el jugador felino dio positivo al virus SAR-CoV2. El jugador fue suspendido un partido, además de aplicarle una multa económica.
Esta vez enciende nuevamente la polémica al comprometer tanto su bienestar y como el del resto de su equipo cuando falta solamente un par de días para ver acción en el encuentro contra Querétaro del domingo 24.