Los secretos de un salvavidas

En los 22 kilómetros de playa que tiene Mazatlán, Sinaloa, existe un equipo de personas que se levantan muy temprano a realizar acondicionamiento físico; además de ser madrugadores, saben hacer rescate en el mar abierto, entre otros conocimientos. Ellos son el Grupo de Rescate y Salvamento Acuático de Mazatlán, Sinaloa, los responsables de monitorear la seguridad de 30 playas.

El perfil de los guardacostas

Gonzalo Magallanes Romero es el coordinador General del Grupo de Rescate y Salvamento Acuático de Mazatlán, Sinaloa, que pertenece a la Secretaría de Seguridad Pública del destino. En entrevista, nos explica que, para poder ser salvavidas se necesita ingresar a esta, además de saber natación y primeros auxilios, para posteriormente, poder acceder a este grupo y recibir un entrenamiento.

Es por lo que en el equipo existen técnicos en urgencias médicas, buzos y rescatistas, además de la retroalimentación que existe en el grupo por parte de quienes ya llevan varios años desempeñándose en la labor de guardacostas/salvavidas. Asimismo, se van profesionalizando con cursos en distintas dependencias, pues básicamente deben estar acondicionados físicamente, saber rescate en el mar y saber RTC en tierra.

“Mi trabajo más que nada es el entrenamiento de los acuáticos. Y coordinar todas las actividades de rescate tanto con Protección Civil como con bomberos, marinos y todas las dependencias que estén relacionadas con el rescate, dado que soy el enlace directo conforme sucede una emergencia, por ejemplo, Cruz Roja”, narra.

Actualmente este grupo está conformado por 28 hombres y una mujer, los cuales son supervisados por Gonzalo dentro y fuera del agua.

Un día siendo salvavidas

Organizan su día laboral conforme al turismo y la hora en que se pone y mete el sol.

“Tenemos actividad física de 7 a 8 de la mañana, porque tenemos un rol de entrenamiento donde me programo para dar acondicionamiento físico; abdomen, brazos, cardio y oxigenación por mencionar algunos. Todo lo que lleve a una respuesta rápida, porque nosotros estamos en situación de reposo y pasamos a una situación en la que nuestro sistema se tiene que activar de inmediato. Lo más rápido que puedas hacerlo. Nosotros hacemos el rescate en aguas abiertas”.

Posteriormente checan las motos, cuatrimotos, radios y en sí, que todo el equipo esté listo para desempeñar el servicio de rescate. Después de ello, el jefe de grupo asigna un área a cada salvavidas acorde a sus aptitudes; dado que previo se tiene conocimiento de las playas más visitadas o de mayor riesgo o con más número de rescates.

Gonzalo menciona que su frecuencia cardiaca aumenta y es demasiada la adrenalina con la que trabajan, por lo que, cada semana van variando sus ejercicios.

Los bañistas

Gonzalo y su equipo defienden que los turistas solo piensan en divertirse, sin embargo, cuando lo cuestionamos sobre las irresponsabilidades más comunes de quienes viajamos a la playa, responde que: “el bañista llega y nunca observa la bandera, la situación geográfica de la playa; y en ocasiones nosotros tenemos que decirle de persona a persona las indicaciones, para evitar que cometa una imprudencia, como ingresar a un lugar de alto riesgo”.

Dice que los salvavidas saben identificar las corrientes del mar, los pozos o las piedras, por ejemplo. Algo que ellos revisan en su rutina diaria para saber qué color de bandera van a colocar.

Nos compartió los significados del color de la bandera para la próxima vez que viajes a Mazatlán:

• Blanca: Hay quemadores, organismos marinos que te dan una sensación de quemadura al contacto con la piel.
• Amarilla: Playa óptima para nadar, pero con precauciones.
• Amarilla con mantarrayas (noviembre, diciembre y enero): Significa que hay mantarrayas en la orilla de la playa que han llegado a reproducirse; y que entre enero y febrero se irán a aguas abiertas, pero debes tener cuidado porque si las pisas te pueden picar.
• Verde: El mar está en calma.
• Roja: Acceso restringido a la playa porque es muy peligroso y alto riesgo.

Se trata de colores universales, menos el amarillo con mantarrayas que fue una idea de prevención en la región.

Finalmente, Gonzalo informa que: “nosotros salvamos vidas y nos preocupamos para que la gente que viene a visitarnos se vaya con bien. Sean observadores, ubiquen al salvavidas, vean si existe alguna indicación, acaten las disposiciones. Y no se metan al mar en estado de ebriedad u en la noche, porque también tenemos un horario (8 de la mañana a 8 de la noche); y aunque yo sigo atento a mi radio, si sucede algo en la noche tal vez nadie se dé cuenta y suceda una desgracia”.

Sabías que …

Después de comer, lo ideal es esperar 15 minutos antes de meterte al mar; o un poco más si tu condición física no es tan buena.

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