En memoria de 52 vidas arrebatadas
El Presidente Felipe Calderón, el gobernador Rodrigo Medina de la Cruz y el secretario de la Defensa Nacional, Guillermo Galván, montaron una guardia de honor y rindieron un minuto de silencio a las afueras del inmueble siniestrado, donde aún olía a muerte.
Una gran cuadrilla aún laboraba en la remoción de escombros del Casino Royale, cuando los trabajadores recibieron la orden de parar las máquinas. Un convoy integrado por varias patrullas de la seguridad municipal de Nuevo León, Policía Federal y elementos del Estado Mayor Presidencial arribó al lugar custodiando una lujosa camioneta negra. De ella descendieron el Presidente Felipe Calderón, la primera dama, Margarita Zavala, Rodrigo Medina de la Cruz, gobernador del estado, el alcalde de la ciudad, Fernando Larrazábal y sus respectivas esposas.
El semblante del Presidente, lo decía todo. Miró por unos segundos el inmueble siniestrado, su rostro reflejaba no tener ninguna respuesta, pero sí muchas interrogantes; una de ellas, la de quiénes pudieron realizar tal acto de barbarie.
Dos hombres de traje negro colocaron frente a la entrada del casino una gran corona de flores con la leyenda “Ciudadano Presidente de los Estados Unidos Mexicanos”. A la derecha del arreglo floral se colocaron el Mandatario y su esposa, del izquierdo hicieron lo propio el gobernador y el alcalde, también con sus cónyuges.
Frente a ellos, decenas de periodistas y camarógrafos tomaron las imágenes que se conservarían para siempre en la memoria de la sociedad mexicana, sobre uno de los hechos más oscuros y tristes en la historia de nuestro país.
Después, los funcionarios montaron una guardia en honor a las 52 víctimas y se guardó un minuto de silencio también, en su memoria. La mirada del Presidente se notó perdida por un momento, sumergida en sus pensamientos, ¿sería que se cuestionaba si había tomado la decisión correcta en su estrategia de combatir al crimen organizado? El reloj marcaba las 16: 25 horas y las nubes negras presagiaban una tarde lluviosa sobre la Sultana del Norte.
COBARDE Y CRUEL ATENTADO: DIPUTADOS
Mientras tanto, en el Senado de la República, el diputado Jorge Carlos Ramírez Marín, presidente de la Mesa Directiva del órgano legislativo, se pronunció a nombre de todos los partidos políticos, e hicieron la petición a las autoridades correspondientes de esclarecer el caso y aplicar todo el peso de la ley a los culpables. Además externaron su repudio por lo acontecido, pues hechos tan lamentables dañaban no sólo a la sociedad regiomontana sino a todos los mexicanos.
Por otra parte, el presidente de la Cámara de Senadores, Manlio Fabio Beltrones, expresó: “Somos mucho pueblo para pensar en una derrota ante el crimen organizado. Somos un gran país que ha demostrado su capacidad para superar retos y dificultades por más grandes que parezcan. Lo sucedido en Monterrey, debe ser un llamado para la acción oportuna y unificada de todos y cada uno de los tres niveles de gobierno. Es una exigencia para que actuemos con mayor colaboración y coordinación”.
PACTAR TREGUA CON CRIMINALES: VICENTE FOZ Q.
Mientras tanto, la tarde del viernes 26 de agosto, el expresidente Vicente Fox Quezada también dio su opinión al respecto, durante un acto con la iniciativa privada en la que estuvo presente en la ciudad de Celaya, Guanajuato. Ahí externó su polémica idea de pactar una tregua con los grupos violentos del país, establecer una ley de amnistía y analizar de manera profunda la legalización de las drogas.
Respecto al atentado al Casino Royale, lo calificó como un crimen de lesa Humanidad y señaló: “La terrible noticia de Monterrey nos llama a una reflexión profunda sobre los hechos violentos que afectan a nuestra nación. Y enfatizó: “Lamento ser la voz discordante, pero los hechos nos dicen que no es con la violencia como se combate la violencia, los niveles de crueldad que vivimos son inusitados”.
Y después aludió a Felipe Calderón: “Llamo a los tomadores de decisiones a revisar por qué la estrategia actual no funciona, por qué no avanza, el por qué a la falta de sentido a las tareas realizadas”.
Por último, el exmandatario dijo que el proceso de paz en el país, sólo sería encauzado mediante vías alternas, como ofrecer mejores oportunidades de vida a los ciudadanos y castigos más ejemplares contra los delincuentes. Sin embargo, Fox Quezada no dio más detalles sobre cuál sería una estrategia eficaz contra la delincuencia organizada.
DESPEDIDA ENTRE LLANTO, LAMENTOS Y UN CLAMOR DE JUSTICIA
Entre indignación, tristeza y frustración, los familiares de las víctimas enterraban a sus muertos y exigían a las autoridades capturar a los asesinos e imputarles un castigo ejemplar; quizás sólo así, podrían mitigar un poco su dolor, pues a sus parientes, ya nada ni nadie se los devolvería.
-¡Justicia! ¡Justicia! ¡Justicia! -Gritaban decenas de personas mientras acompañaban el cortejo fúnebre en memoria de Eduardo Martínez, una de las 52 víctimas que fallecieron en el atentado contra el Casino Royale. Era casi mediodía del sábado 27 de agosto y el sol caía a plomo sobre el Panteón Dolores, ubicado a pleno centro de la ciudad de Monterrey.
A dos días de la tragedia, se entregaron 45 cadáveres a sus deudos, y comenzaron a darles sepultura. Siete cuerpos eran sometidos aún a pruebas de ADN, pues estaban completamente carbonizados, irreconocibles para ser otorgados a sus familiares.
En los panteones San José y del Carmen el ambiente no era distinto. Otras personas enterraban a sus muertos, también fallecidos en el cobarde ataque al Casino Royale. Dolor, tristeza y llantos abundaban por los camposantos, pero también la indignación y el coraje de algunos parientes que exigían a las autoridades realizar una investigación a fondo para dar con los criminales y aplicarles un castigo ejemplar.
Fue el caso del señor Adolfo, quien consternado por la pérdida de su hermana María Guadalupe Monsiváis, de 24 años, pasó de la indignación al reclamo y expresó: “Lo que hicieron no tiene nombre. Estamos muy indignados, hay mucha policía y pasan y pasan cosas; ¿qué les hizo mi hermana? Si iban por el dueño del casino, ellos saben dónde encontrarlo. ¡Por qué tenían que afectar a gente inocente!”, dijo muy molesto.
Y las exigencias de justicia y de esclarecer el caso se multiplicaron por parte de los familiares, a quienes ya era lo mínimo que las autoridades podían hacer por ellos, por desgracia, a sus parientes los habían perdido para siempre, pues la vida no vuelve.
TERMINÓ LA BÚSQUEDA DE CUERPOS
Por otra parte, mientras se realizaban los sepelios de los fallecidos, el Gobierno de Nuevo León anunció que la búsqueda de cadáveres éntrelos escombros del Casino Royale, se daban por concluidos.
En su informe, el director de Protección Civil de Nuevo León, Jorge Camacho, declaró: “Esta mañana, hemos dado por concluidas las actividades de búsqueda y rescate. Ya no hay más cuerpos en las ruinas del edificio. La cifra oficial de fallecidos es de 35 mujeres, una de ellas embarazada, lo que podría contarse como una víctima más, y 17 hombres. Un total de 45 cadáveres han sido identificados plenamente y entregados a sus familias, mientras que los siete restantes deben someterse a pruebas de ADN, por su estado de calcinación”.
También precisó, que la mayoría de los muertos fueron hallados en los baños y otros puntos del local, en donde se trataron de esconder, debido a que en un inicio pensaron que se trataba de un asalto y no de un incendio. Y por último señaló, que 12 personas más se encontraban recuperándose en distintos hospitales, sólo tres de ellas en estado grave.
FCH: ¡INSACIABLES POR DROGAS Y VENTA DE ARMAS!
Después de un día ajetreado por la Sultana del Norte, el Presidente Felipe Calderón regresó entrada la noche a la Ciudad de México. Fue desde la Residencia Oficial de Los Pinos, desde donde dirigió un último mensaje a toda la nación, respecto a la tragedia acaecida en la casa de apuestas Royale.
En su discurso, el Mandatario arremetió contra el gobierno de los Estados Unidos, quizás agobiado por la responsabilidad que le demandaba aclarar el caso. Así es que cargó responsabilidad al vecino poderoso por la violencia vivida en los últimos meses en México. Los exhortó a frenar su insaciable consumo de armas y drogas debido a que nuestro país estaba pagando la peor parte, con vidas de miles de personas inocentes y aseveró:
“Es por eso, que es mi deber hacer un llamado a la sociedad, al Congreso y al gobierno de los Estados Unidos, para que reflexionen acerca de la tragedia que estamos viviendo en México y en muchos países latinoamericanos, a consecuencia, en gran parte, por el consumo insaciable de drogas en el que participan millones y millones de norteamericanos.
“El poder económico y de fuego de las organizaciones criminales que operan en México y en América Latina, tiene que ver con esta interminable demanda de drogas de los Estados Unidos. Esas decenas de millones de dólares terminan armando y organizando a los criminales, y poniéndolos a su servicio en contra de los ciudadanos.
“No hay razón para que los cientos de miles de armas vendidas a los criminales apuntes a los mexicanos y sus autoridades. Somos vecinos, aliados. Somos amigos, pero también, ustedes son responsables. Ese es mi mensaje”, culminó.
FUSTIGÓ FCH AL LEGISLATIVO
Por otro lado, el Presidente también envió un mensaje a los legisladores de nuestro país, para dejar los intereses personales y de partido, con el objetivo de hacer una unión contra las organizaciones criminales. De manera enérgica se dirigió a ellos: “Es momento que también asumamos sin regateos y sin mezquindades… Al Congreso de la Unión les pido, que nos dejen hacer nuestro trabajo y que doten a las fuerzas federales de certidumbre jurídica y de las atribuciones legales indispensables, para enfrentar con eficacia a semejante amenaza de la seguridad nacional. ¡Este asunto debe resolverse ya!”
Afirmó que el avance de las organizaciones criminales se debía “a la enorme corrupción que prevalece en las instituciones de seguridad y justicia en todas las regiones del país y en los distintos órdenes de gobierno. Debemos depurar y fortalecer cuanto antes, nuestros cuerpos policiacos y ministeriales en todo el país, es hora de entrarle a fondo”.
AL PODER JUDICIAL
A este orden del Estado, Felipe Calderón pidió replantear sus estructuras e integrantes y puntualizó: “Les pido que revisen sus propios criterios, a fin de encontrar la manera de cerrar la brecha, la cual se abre cada día más entre la existencia de un hecho criminal y los criterios jurídicos que hacen posible su castigo.
“La distancia entre la verdad real y lo que se conoce como la verdad legal. La verdad real, la que preocupa a pueblo, es que esos criminales están en las calles sin castigo y todos estamos obligados a revertir esa impunidad”, afirmó.
Por último, les demandó revisar las resoluciones judiciales, que permiten la operación de muchos establecimientos de esta naturaleza o de giros negros, donde opera la delincuencia en diversas partes del país.
Con el llamado a toda la nación para estar unidos sociedad y gobierno, concluyó aquel día agitado para el Presidente Felipe Calderón, sin embargo, aún venía lo más complicado, que era mover todas las instancias a su cargo, para dar con los criminales del Casino Royale.
Apoderado legal: "Operábamos bajo la ley"
El abogado Juan Gómez Jaime señaló que la empresa era una víctima más de la tragedia, por lo tanto, no podían indemnizar a los parientes de los fallecidos, esa responsabilidad, dijo, correspondía al Estado cumplirla
Las autoridades y fuerzas federales se encontraban muy ocupadas buscando cualquier información que los llevara a la captura de los sicarios, pero también, la cacería incluía a los dueños de la casa de apuestas, quienes tenían muchas explicaciones que dar, sin embargo, sólo se sabía, tan pronto ocurrió la tragedia, abandonaron el país.
No obstante, LA PRENSA pudo dar con el apoderado legal del casino, un sujeto de nombre Juan Gómez Jaime, quien aseguró que era falso que el local operaba sin permiso o fuera de la ley.
“Es mentira lo que se ha dicho, lo que pasa es que el alcalde de Monterrey o no lo asesoran bien sus abogados, o le falta información”, además aseguró que la tragedia no era responsabilidad de la administración del casino: “La empresa es una víctima más de lo ocurrido, por la magnitud de los hechos, nosotros no estamos en posibilidades de indemnizar a los deudos de los clientes fallecidos o que resultaron lesionados. Esa situación le corresponde al Estado, que tiene la obligación de dar seguridad a los ciudadanos”, puntualizó.
Dejo en claro que: “La realidad jurídica del local, cuando ocurrieron los hechos, es funcionando conforme a derecho y no recibió ningún favor de tribunales para autorizar el funcionamiento del local. Son las mismas autoridades municipales, quienes tienen una copia de la autorización y la suspensión por la cual estaba funcionando el casino”.
Y finalizó: “Los señores empresarios del casino quieren dejar bien claro que, manifiestan sus condolencias a todos los familiares de las víctimas que murieron en el lugar. Y por otra parte, los clientes y trabajadores del casino tienen toda la solidaridad, en lo que legalmente sea posible para apoyar a los deudos, de quienes perdieron la vida en tan lamentables hechos”.
El señor Juan Gómez Jaime también señaló que estaban en la mejor disposición de colaborar con las autoridades en las investigaciones y en deslindar responsabilidades. Y aclaró: “Para que operara el Casino Royale, acudimos con las instancias pertinentes para trabajar de acuerdo con la ley y las normas exigibles, por lo que primero tramitamos el permiso de construcción, uso de suelo, permiso de casino, los cuales nos otorgaron las autoridades competentes, entre ellas, la Secretaría de Gobernación y las del municipio”, concluyó.
CLAUSURÓ SAT CASINOS DE NUEVO LEÓN
El atentado de terror en el Casino Royale destapó la corrupción con la que operaban esos negocios. Unas cuantas horas después de la tragedia, las autoridades desplegaron un operativo con apoyo de las fuerzas policiacas para visitar todas las casas de juego en Nuevo León y conocer las condiciones en las que trabajaban.
Y no fue sorpresivo confirmar que varios operaban fuera de la ley. En realidad, es un vicio muy arraigado en nuestra cultura. La corrupción y la impunidad son dos aspectos vergonzosos que nos definen, queramos o no, a los mexicanos. Para la tarde del viernes 26 de agosto, el SAT había incautado alrededor de mil 500 máquinas de juegos y detenido a 12 personas.
Al día siguiente, el recorrido de las autoridades continuó por los municipios de Apodaca y San Pedro Garza García, donde decomisaron más máquinas, clausuraron varias casas de juego y se detuvieron a más personas. En el operativo, participaron más de 500 elementos entre las Fuerzas Armadas, PGR, Secretaría de Seguridad Pública de Nuevo León y del SAT, quienes se movían en ostentosos convoyes, para apantallar, pero ya nada de lo que hicieran podía evitar la tragedia sucedida y mucho menos, borrar los actos violentos que se vivieron meses atrás en la ciudad de Monterrey. Pero lo que sí consiguieron, fue desnudar la misma corrupción que ellos mismos permitieron, al otorgar amparos y permisos de forma ilegal, claro, un negocio sucio que les deja muchas ganancias.
No obstante, el gobernador de Nuevo León declaró al respecto: “Debido al repudio de los ciudadanos, ni un casino más en nuestro estado. Éstos han proliferado en exceso y han generado graves daños sociales”, y destacó que presentaría una reforma de ley, para que el Tribunal de lo Contencioso Administrativo no pudiera otorgar más permisos a casas de juego. Y por último, señaló que el magistrado José Alfonso Solís Navarro fue removido de su cargo, por otorgar un amparo de forma corrupta a los dueños del Casino Royale, para que pudiera operar.
PGR: Cayeron dos presuntos sospechosos
Mientras miles de personas se manifestaron en contra de la violencia en el estado de Nuevo León, las autoridades lograron la captura de dos sujetos implicados en el ataque al Casino Royale
“¿Hasta cuándo tendremos tranquilidad otra vez? Con cada matanza nuestro miedo aumenta. Ya nadie está seguro en ningún lugar. Este es un claro ejemplo de la impunidad con que circulan en las calles los grupos del crimen organizado sin que la autoridad los detenga. Esta situación de terror no puede continuar en nuestro país. ¡Por el amor de Dios, que alguien haga algo!”, declaró un familiar de las víctimas del atentado en el Casino Royale, la tarde del sábado 27 de agosto, a las afueras del inmueble, cuando decenas de personas se reunieron ahí, para realizar un acto de protesta contra el gobierno y al mismo tiempo, rendir un homenaje a las personas fallecidas en el ataque.
Empleados del casino, familiares y sociedad en general, se tomaron de las manos, formaron un círculo y bajo una llovizna incesante, oraron en memoria de las 52 personas muertas. Encendieron veladoras con el nombre de cada víctima mientras exigían al mismo tiempo, que las autoridades detuvieran a los sicarios despiadados, así como, poner fin a la violencia padecida en Monterrey en los últimos meses.
LA MACRO PLAZA SE VISTIÓ DE BLANCO
Miles de personas se congregaron el domingo 28 de agosto en la Macro Plaza, de Monterrey, para manifestar su rechazo a la violencia y contra el atentado al Casino Royale. Unidos en una sola voz, los manifestantes gritaron consignas contra el gobernador, Rodrigo Medina de la Cruz y hacia el Presidente Felipe Calderón, a quien acusaron de llevar a cabo una estrategia errónea para combatir al crimen organizado. También exigieron el cierre de los casinos, las casas de juego en el estado y el esclarecimiento del ataque.
Entre los asistentes, se encontraban por supuesto, familiares de los fallecidos y empleados del Casino Royale, quienes expresaron lo siguiente: “Ahora ya no tenemos empleo, ni siquiera la seguridad de que los dueños del casino nos paguen nuestra quincena, pese a ello, este era el empleo con el que manteníamos a nuestras familias”, dijo uno de ellos.
Asimismo, denunciaron que recibieron malos tratos por parte de los ministerios públicos donde acudieron a levantar sus demandas, y se mantenían en la incertidumbre por saber si recibirían apoyo psicológico, toda vez, que las autoridades de gobierno y los apoderados del casino se echaban la bolita unos a otros, para deslindar su responsabilidad.
En la protesta, también se dio lectura a una lista con el nombre de las personas fallecidas, la cual causó polémica y algunos enfrentamientos, debido a que algunos familiares mencionaron que en ella no se había incluido a sus deudos, como en los casos de una mujer de nombre Julia, de quien hasta ese momento no se había encontrado su cadáver, y el de otro muchacho que laboraba en el casino, de quien sólo se dio a conocer que se llamaba José, quien tampoco se había entregado su cuerpo y tampoco se encontraba entre los lesionados que se recuperaban en los hospitales.
Por esa razón, los parientes exigían que la búsqueda se reanudara en el inmueble siniestrado, pues tenían la convicción de que sus fallecidos todavía se hallaban entre los escombros del local, el cual contaba con dos plantas que se vinieron abajo debido al incendio. Sin embargo, las autoridades ya habían culminado dicha tarea y dado por sentado que no había más cadáveres en el lugar.
CAPTURARON A DOS SOSPECHOSOS DE PARTICIPAR EN EL ATENTADO
Mientras continuaban los entierros de las víctimas del incendio en el Casino Royale y miles de personas protestaban contra la violencia en la Macro Plaza de Monterrey, elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones de Nuevo León capturaban a dos presuntos implicados en el atentado a la casa de apuestas.
El funcionario que salió a dar las primeras declaraciones al respecto, fue Jorge Domene, vocero de Seguridad del gobierno de Nuevo León, quien señaló que la aprehensión se llevó a cabo en el municipio de Escobedo, en los límites con el de San Nicolás de los Garza. No obstante, se reservó los nombres de los dos sospechosos con el argumento de no entorpecer las investigaciones. Pero señaló que después de ser capturados por elementos de la AEI, éstos los llevaron a las instalaciones de la SIEDO de la Procuraduría General de la República.
Por la noche, la PGR informó lo siguiente: “La PGJ del estado de Nuevo León mantiene bajo arresto a dos presuntos involucrados en el atentado al Casino Royale, donde fallecieron 52 personas”. Se reveló que su captura fue posible debido a que un par de horas antes de su arresto, robaron una camioneta en la colonia Ciudad Solidaridad, en el municipio de Escobedo, la cual fue reportada a la policía, a su vez, ésta les siguió el rastro hasta detenerlos. Esta información la confirmaría el gobernador Rodrigo de la Cruz minutos más tarde, ante los medios de comunicación, además de señalar que acudió a las instalaciones de la SIEDO para confirmar en persona dicha detención.
CONTINUARÁ…
