En México al menos 9 millones de mujeres han sufrido violencia digital, la cual abarca desde el envío de contenido sexual no solicitado (32.8%) hasta el envío de imágenes explícitas, insinuaciones o propuestas por redes sociales, mensajería o correo electrónico (40.3%).
A pesar de los avances legislativos, todavía falta mucho por hacer, ya que de acuerdo con la Encuesta Nacional Disponibilidad y Uso de las Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH) 2020, en México hay 77.6 millones de usuarios de internet mayores de 12 años, de los cuales, el 21% declaró haber vivido, entre octubre de 2019 y noviembre de 2020, alguna situación de acoso cibernético; de ellos, el 52% fueron mujeres.
La Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Ciudad de México informa que del 1 de enero al 15 de noviembre de 2020, un total de 5 307 personas reportaron algún incidente cibernético, de las cuales 71% corresponde a mujeres, siendo el acoso cibernético el delito más denunciado con 2,017 casos; seguido por extorsión con 469 casos y amenazas con 405.
No obstante, organizaciones civiles con perspectiva de género señalan que a partir de la pandemia por COVID-19, los actos de violencia digital incrementaron gradualmente y estiman que al menos el 40.3% de las mujeres en México que usan internet sufrió insinuaciones o propuestas sexuales por redes sociales digitales, mensajería y correo electrónico.
Por ello, existen diferentes esfuerzos e iniciativas por parte del sector privado, para promover campañas educativas que prevengan la violencia digital, incluyendo el uso de mecanismos de reporte de las plataformas y herramientas para hacer frente a dicha violencia, como OrientaSEX, una plataforma de ayuda que brinda información, orientación y consejería, gratuita y confidencial, para adolescentes, jóvenes y padres de familia, en cualquier temática relacionada Violencia Basada en Género.
Ante esta problemática, la empresas de cosméticos y artículos de cuidado personal como Avon anunció la ampliación de sus contenidos sobre algunas situaciones de violencia que suceden en el entorno digital y se sumaron a la campaña #sinohaySíesNo, a fin de generar nuevas formas de pensar, para que cada vez más personas puedan hacer conciencia sobre este problema que puede ocasionar a las víctimas daños emocionales, laborales, sociales, familiares e incluso económicos a las víctimas de acoso cibernético.