A pesar de que en los discursos de alcaldes y funcionarios se ensalza el compromiso institucional de trabajar hasta el último minuto de los periodos de gobierno, la realidad es que en el tramo final de las administraciones sólo se dedican a “levantar la casa”, revisando el epílogo de privilegios previos al cambio de estafeta. Lo que menos hacen los gobernantes es un ejercicio de autocrítica y mucho menos de conciencia sobre las condiciones en las que dejan a sus respectivos territorios. Un ejemplo del desastre que queda y que va en detrimento de la población, pues al final es la que paga los fracasos y las pésimas gestiones de las autoridades, es el tema de la inseguridad, el mismo que en todos los niveles de gobierno, desde hace tiempo, ha rebasado toda estrategia o intento de estrategia gubernamental. En un solo ejemplo de lo que se vive a diario, la Encuesta de Seguridad Pública Urbana del INEGI exhibe las derrotas de los gobiernos de Cuautitlán Izcalli, Naucalpan y Ecatepec, al considerar que en esos municipios los ciudadanos no se sienten seguros a la hora de abordar una unidad del transporte público. Si durante el tiempo que duró el periodo constitucional de gobierno los presidentes municipales no fueron capaces de contribuir en la lucha anticrimen y generar condiciones de mayor tranquilidad y paz para las familias, en estos momentos en los que están a menos de dos meses de entregar las administraciones mucho menos mostrarán interés, aunque digan que van a “trabajar” hasta el último minuto. En el caso de Ecatepec el entonces alcalde de Morena, Fernando Vilchis Contreras, actual diputado federal, se dio el lujo de “dobletear”, pues en dos ocasiones fungió como alcalde y ni así pudo revertir la alta percepción de inseguridad que tiene la población. En Naucalpan y Cuautitlán Izcalli, ayuntamientos encabezados por alcaldesas de extracción panista, Angélica Moya Marín y Karla Fiesco García, respectivamente, los supuestos programas y acciones para combatir a la delincuencia resultaron un rotundo fracaso, pues la Encuesta de Seguridad Pública Urbana advierte claramente el sentir de la población. Gobierno van y gobierno vienen, pero la población parece estar condenada al yugo de los criminales.
A RENGLÓN SEGUIDO
QUIENES tienen una veladora prendida son los trabajadores del Poder Legislativo mexiquense, justo tras el anuncio del presidente de la Junta de Coordinación Política, el morenista, Francisco Vázquez Rodríguez, luego de que anunciara que pugnará por un incremento del 4.6% en el presupuesto del Congreso para 2025. El legislador cercano a la gobernadora Delfina Gómez Álvarez dice que el incremento es supuestamente para mejorar el salario de los empleados de la Cámara de Diputados y no para los congresistas… ENCARRERADOS están los diputados mexiquenses ahora que hay una ola reformista, calificada por la oposición como represión dictatorial, pues ahora van decididos a concretar una nueva Constitución para el Estado de México, un tema en el que los integrantes de la fracción morenista pueden hacer y deshacer a su antojo, amén de que poseen el control legislativo. El argumento es que se requiere una actualización del marco legal en el estado, aunque habrá que esperar qué tipo de ajustes pretenden y si van en favor de la población… AUN CUANDO el gobierno de Atizapán de Zaragoza, a cargo del alcalde Pedro Rodríguez Villegas, destaca resultados positivos en materia de combate a la delincuencia, los hampones han encontrado una forma muy discreta de hacer de las suyas, al robar vehículos estacionados, uno de los delitos que muestran una tendencia ascendente en calles y avenidas de la localidad.