El pasado viernes 31 de mayo, dos días antes de las elecciones presidenciales, el dólar se cotizaba en 16.70 pesos por billete verde, al cierre del miércoles 12 de junio, el dólar operó en 18.75 pesos por dólar, esto significa una depreciación de 2.15 pesos por dólar y todo indica que podría seguir subiendo hacia 20.00 pesos.
A pesar de la tasa de interés de 11.00% que paga México a los capitales extranjeros por comprar deuda mexicana, los fondos de inversión han empezado a sacar su dinero del país, están preocupados por lo que pueda ocurrir con las reformas constitucionales que se presentarán en la próxima legislatura y que muy probablemente se aprobarán en el Congreso en septiembre cuando empiecen las cámaras a sesionar nuevamente.
Claudia Sheinbaum ganó con una aplastante mayoría las elecciones presidenciales lo que le permite a Morena tener mayoría calificada en el Congreso. En consecuencia, puede hacer cambios a la Constitución, así como a las reglas de operación de cualquier sector productivo del país; esto incluye los impuestos que se cobran, la forma en que se eligen ministros de la Suprema Corte, incluso al presidente de México o la cantidad de diputados y senadores que debe haber en cada Cámara y cómo se podrían seleccionar en un futuro.
Cuando hay posibles cambios en las reglas del juego, los inversionistas se ponen muy nerviosos, algunos deciden retirar sus capitales, para ver cuáles serán las modificaciones y una vez, que las mismas se aprueban, decidirán si regresan o no al país bajo las nuevas condiciones de operación.
Cuando Trump en 2016 dijo que cambiaría el Tratado de Libre Comercial (TLCAN), también hubo volatilidad cambiaria, cuando el mundo entró en cuarentena por COVID hubo volatilidad y ahora que López Obrador con la anuencia de Claudia Sheinbaum dice que habrá cambios en las reglas, está provocando la volatilidad en los mercados financieros.
Siempre que hay modificaciones, hay volatilidad porque los inversionistas hacen sus estimaciones de cuánto dinero obtendrán si hacen una inversión, pero si el escenario cambia o su dinero está en riesgo, pueden optar por salirse de ese negocio e irse a otro país que les ofrezca más seguridad o la misma seguridad y una tasa de interés no tan alta, sin tanto riesgo.
Hasta que no conozcamos los detalles de las reformas que se proponen y cómo afectará eso las inversiones, no habrá tranquilidad en los mercados financieros. Lamentablemente y contra toda lógica, la 4T ha hecho cambios que afectan las inversiones. Por eso el país creció solamente 0.8% con AMLO frente al 2.5% promedio con EPN; AMLO solamente creó 2.5 millones de empleos en el IMSS, mientras que con EPN esa cifra fue de 4.8 millones.
Si los cambios, no son del agrado de los inversionistas, no vendrán a México como se esperaba y buscarán otros países que si les ofrezcan la seguridad que necesitan para trabajar, por eso hay que tener cuidado con las reformas que se proponen.
Carlos López Jones
Director de Consultoría en Tendencias.com.mx
@Carloslopezjone