Esta semana se firmó la renovación del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC). 19 empresas productoras de alimentos y 11 empresas comercializadoras se comprometieron a mantener la canasta básica de 24 productos sin variación de precio por los próximos seis meses, por lo que en conjunto estos bienes costarán 910 pesos.
El PACIC no ha funcionado para frenar la inflación y llevarla a la meta de 3.0%. Firmado desde 2022 el aumento de precios en la economía mexicana de acuerdo con el INEGI se ubicó en 4.72% en los últimos 12 meses, donde destaca el alza de frutas y verduras en más de 15% en el último año.
La inflación bajó de 2022 a 2023 porque el precio del petróleo bajó a nivel mundial al confirmarse que, a pesar de las sanciones impuestas por Estados Unidos y Europa, Rusia le seguía vendiendo petróleo a China y otros países, así como menores precios internacionales del trigo, maíz, sorgo, cebada, entre otros, conforme el espacio que dejaron Rusia y Ucrania por el conflicto fue ocupado por otros productores mundiales de granos.
En Estados Unidos por ejemplo la inflación anual es de 2.6%, en China es de 0.4%, pero en México el alza de precios sigue por encima de 4.5%.
Si el gobierno quiere que baje la inflación, lo que debe hacer es, por un lado, hacer frente al crimen organizado que le cobra cuotas y derecho de piso y paso, a los productores del campo mexicano ya que si no cumplen con sus demandan, los secuestran, matan o destruyen sus huertas como ya ha sucedido.
La inseguridad en el sector primario provoca que muchos productores abandonen sus cosechas al negarse a pagar las extorsiones o que suban su precio al intermediario, lo que genera escasez y alzas de precios finales al consumidor.
El gobierno también debe cambiar su estrategia de precios mínimos de garantía por seguros para el campo. Este año las lluvias han sido intensas y muchos productores perdieron sus cosechas y el próximo año puede haber sequías o huracanes con el mismo efecto, por lo que es necesario tener seguros que cubran estos eventos y les aseguren ingresos a los productores, para tener dinero para comprar semillas y fertilizantes para la siguiente cosecha.
Finalmente, lo más importante es ya no subir el salario mínimo por encima de la inflación esperada de 4.0%. La Presidente Claudia Sheinbaum insiste en un aumento de 12% para el próximo año y los productores deberán reflejar ese aumento en sus precios finales. Probablemente no suban los precios 12% pero si entre 6.0 y 8.0%.
El PACIC no ha funcionado ni funcionará en reducir la inflación a niveles cercanos a 3.0%, porque el gobierno no ha puesto de su parte. Un decreto no va a parar las extorsiones, ni tampoco pagará los aumentos de sueldos.
Carlos López Jones - Director de Consultoría en Tendencias.com.mx
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