Las Pymes en México representan un pilar fundamental para la economía. Este sector es el más grande en el ámbito empresarial mexicano y tiene una gran capacidad de generación de empleos, además de impulsar la innovación y contribuir en la distribución de productos y empujar al desarrollo socio-económico de las regiones donde se encuentran. Las pymes, las pequeñas y medianas empresas de México, somos los pobres del Sector empresarial mexicano y, los que menos apoyos hemos recibido ante la visibilidad de las políticas públicas de los gobiernos en general y del Federal en particular y, esto, es muy delicado porque en el resto del mundo, las economías internacionales se sustentan mucho en su comercio interno y en sus pymes. Si bien es cierto que las grandes empresas son importantes, también es cierto que a los muy ricos del sector empresarial les fue como nunca en la historia de sus actividades empresariales en México, crecieron sus fortunas, sin embargo, las pymes viene sufriendo una serie de consecuencias negativas, como lo fue la pandemias, enfrentaron vicisitudes solos, sobreviviendo y, para acabarla de amolar, ahora en nuestro país y, en especial, en el Centro Histórico de la CDMX, los productos chinos están invadiendo el mercado, con productos de baja calidad, que no cumplen con las normas internacionales y nacionales, como nosotros, las pymes si estamos cumplimos y obligados.
El avasallante ingreso de productos chinos a nuestro territorio nacional pone al consumidor mexicano en grave riesgo, ya que al comprar productos chinos, sobre todo eléctricos, juguetes o de movilidad, se corre el riesgo, como ya ha sucedido, de generar cortos circuitos, explosiones de baterías, incendios por computadoras o Lap Top chafas en el hogar o negocio, Etc. O bien, si compras juguetes chinos, los cuales vienen llenos de plomo, o no cuentan con normas de salud o mecanismo para proteger al consumidor, en especial, a los niños. Por ello, es fundamental y por el bien de México, primero las Pymes.
Por ejemplo, que harían los refresqueros o las empresas de pan, sin el millón de tiendas de abarrotes de los cuatro millones de tiendas de venta de diversos productos que existen en el país. Esos pequeños negocios son las que posibilitan que las grandes empresas crezcan, amén de que se ahorran los pasivos laborales, así como, mueven y venden sus productos en toda la nación. Tan solo en la Ciudad de México existen 100 mil tienditas de abarrotes.
Marcelo Ebrard, próximo secretario de Economía, conoce perfectamente el tema de las necesidades de las Pymes y, está muy sensibilizado para apoyar o promover acciones de apoyo para las Pymes. Esperamos pues, que en la administración entrante sí existan programas y acciones de apoyo y respaldo a las Pymes del Sector privado. También sabemos que a los políticos les gustan mucho las fotografías con los magnates empresariales, que por cierto generan no más del 30 por ciento de los empleos formales en México. El resto los generan las Pymes. Nunca he visto fotos con micro o pequeños empresarios que, pagan impuesto, servicios, traslados, luz, agua Etc., o salir de palacio nacional; tampoco veo que su voz sea escuchada proponiendo políticas nacionales que beneficien el desarrollo del segmento, el crecimiento para bien de todos y en especial de México.