/ sábado 23 de noviembre de 2024

Escena del crimen / Terror, violencia y detectores de metal en el Metro de la CDMX

El sistema de Transporte Colectivo Metro está colapsado no sólo para la movilidad de la ciudadanía, que a diario puede enfrentar desde enfrentamientos verbales o físicos debido al desborde de personas que viajan en las horas pico, también por la deficiente seguridad con la que se resguardan sus 195 estaciones: 115 subterráneas, 55 superficiales y 25 elevadas.

Sumado a esto están los casos insólitos que en espacios como el Metro se vuelven cotidianos: ataques y hechos de terror como el ocurrido el pasado 19 de noviembre en la estación Tacubaya de la línea 7, donde el joven Jimmy Arnulfo N, alias Kevin agredió con un cuchillo a un grupo de personas. El jueves quedó vinculado a proceso acusado de homicidio calificado en grado de tentativa, con alevosía y ventaja, en agravio de cuatro usuarios.

Jimmy "N" quedará internado y bajo proceso, luego de confirmarse que sufre de esquizofrenia y que el día del ataque se encontraba bajo los efectos de sustancias nocivas, permanecerá en el Centro Varonil de Rehabilitación Psicosocial en la alcaldía Xochimilco.

Lo grave del caso es que este ataque ocurrió con un objeto punzocortante de metal y se supone que desde hace 15 años fueron instalados 350 detectores fijos de metales para que fueran colocados en toda la red de pasajeros, y 3 mil 101 cámaras de videovigilancia con una inversión de 50 millones de pesos para “fortalecer la seguridad de los usuarios”, eso era el objetivo según lo dicho en ese entonces por Francisco Bojorquez, quien era el titular del Metro.

Como siempre ocurre, esta acción fue motivada por otro ataque ocurrido en este sistema de transporte. Ocurrió el 18 de septiembre de 2009 cuando un hombre desató terror dentro de la estación Balderas. Eran alrededor de las 17:15 horas de ese día, cuando el sujeto comenzó a disparar, dejando a dos personas sin vida y a otras siete heridas.

Por varios minutos, el agresor identificado como Luis Felipe Hernández sembró el miedo hasta que la entonces policía judicial logró capturarlo dentro de uno de los vagones a quien se dijo ser “un mensajero” de los peligros del deterioro ambiental.

Después de varias semanas de instalado este sistema detector de metales, las autoridades del Metro y los agentes de la policía complementaria de la SSC dejó de poner atención en la revisión de mochilas y bultos, debido a la cantidad de usuarios que abarrotaban con filas para poder ingresar a las estaciones.

Meses, años después, en algunas estaciones, esos sistemas de vigilancia se volvieron objetos decorativos, porque dejaron de funcionar por falta de mantenimiento o porque su operación implica un costo y no podía cubrirse.

Este viernes nos enteramos por una nota publicada en la OEM por la reportera Dana Estrada que el Metro de la CdMx retiró los arcos detectores de metales y rayos X en al menos ocho estaciones de alta afluencia.

Hasta 2020, el Sistema de Transporte Colectivo informó que de los 39 binomios, compuestos de arcos y dispositivos de rayos x, sólo estaban instalados 16 en igual número de estaciones. Los equipos fueron adquiridos entre 2010 y 2013 y costaron 23 millones y ocho millones 967 mil pesos, respectivamente.

Algunos se ubicaban en las estaciones Zócalo, específicamente en el acceso colindante a la Catedral; en Bellas Artes, en los torniquetes con dirección a Taxqueña; en Cuatro Caminos, en el único acceso de la estación, en Balderas, la cual reabrió sus puertas en septiembre de este año y en Universidad. En cuatro años, los equipos, que buscan prevenir la comisión de delitos, fueron retirados y su ausencia pasó desapercibida entre usuarios y trabajadores; 31.9 millones de pesos fue el costo de los 39 equipos que fueron colocados en diversas estaciones.

Sumado a esta decisión, ha quedado demostrado que los agentes de las policías: Auxiliar y Bancaria e Industrial de la Secretaría de Seguridad, tampoco cuentan con la capacitación necesaria para enfrentar estas crisis y solo hacen “presencia”.


EVIDENCIAS

Nos cuentan que quienes andan emberrinchados en el Congreso capitalino son los diputados de Morena, hasta conferencias le hacen a la Presidenta de la Comisión de Planeación del Desarrollo, Olivia Garza. Resulta que la legisladora anunció una serie de foros de cara a la elaboración de los planes de desarrollo de la Ciudad de México. Eso no les gustó a los morenistas, en especial a Víctor Hugo Romo, quien se quejó de que no fue invitado y criticó que medios de comunicación hayan considerado estos foros como parte del Congreso y no solo de la presidenta de la Comisión.

Sin embargo, el resultado no fue el esperado por los morenistas, pues los reporteros les recordaron que Alejandro Encinas anunció que los instrumentos de planeación ya se estaban elaborando pero sin consulta a la ciudadanía, en resumen: el gobierno de Clara Brugada resultó más criticado que la misma diputada a quien querían “linchar mediáticamente” y todo porque no le perdonan que les esté marcando la agenda en la CdMx.

MAIL: gerardo.jimenez@elsoldemexico.com.mx

X: @Santomitote

El sistema de Transporte Colectivo Metro está colapsado no sólo para la movilidad de la ciudadanía, que a diario puede enfrentar desde enfrentamientos verbales o físicos debido al desborde de personas que viajan en las horas pico, también por la deficiente seguridad con la que se resguardan sus 195 estaciones: 115 subterráneas, 55 superficiales y 25 elevadas.

Sumado a esto están los casos insólitos que en espacios como el Metro se vuelven cotidianos: ataques y hechos de terror como el ocurrido el pasado 19 de noviembre en la estación Tacubaya de la línea 7, donde el joven Jimmy Arnulfo N, alias Kevin agredió con un cuchillo a un grupo de personas. El jueves quedó vinculado a proceso acusado de homicidio calificado en grado de tentativa, con alevosía y ventaja, en agravio de cuatro usuarios.

Jimmy "N" quedará internado y bajo proceso, luego de confirmarse que sufre de esquizofrenia y que el día del ataque se encontraba bajo los efectos de sustancias nocivas, permanecerá en el Centro Varonil de Rehabilitación Psicosocial en la alcaldía Xochimilco.

Lo grave del caso es que este ataque ocurrió con un objeto punzocortante de metal y se supone que desde hace 15 años fueron instalados 350 detectores fijos de metales para que fueran colocados en toda la red de pasajeros, y 3 mil 101 cámaras de videovigilancia con una inversión de 50 millones de pesos para “fortalecer la seguridad de los usuarios”, eso era el objetivo según lo dicho en ese entonces por Francisco Bojorquez, quien era el titular del Metro.

Como siempre ocurre, esta acción fue motivada por otro ataque ocurrido en este sistema de transporte. Ocurrió el 18 de septiembre de 2009 cuando un hombre desató terror dentro de la estación Balderas. Eran alrededor de las 17:15 horas de ese día, cuando el sujeto comenzó a disparar, dejando a dos personas sin vida y a otras siete heridas.

Por varios minutos, el agresor identificado como Luis Felipe Hernández sembró el miedo hasta que la entonces policía judicial logró capturarlo dentro de uno de los vagones a quien se dijo ser “un mensajero” de los peligros del deterioro ambiental.

Después de varias semanas de instalado este sistema detector de metales, las autoridades del Metro y los agentes de la policía complementaria de la SSC dejó de poner atención en la revisión de mochilas y bultos, debido a la cantidad de usuarios que abarrotaban con filas para poder ingresar a las estaciones.

Meses, años después, en algunas estaciones, esos sistemas de vigilancia se volvieron objetos decorativos, porque dejaron de funcionar por falta de mantenimiento o porque su operación implica un costo y no podía cubrirse.

Este viernes nos enteramos por una nota publicada en la OEM por la reportera Dana Estrada que el Metro de la CdMx retiró los arcos detectores de metales y rayos X en al menos ocho estaciones de alta afluencia.

Hasta 2020, el Sistema de Transporte Colectivo informó que de los 39 binomios, compuestos de arcos y dispositivos de rayos x, sólo estaban instalados 16 en igual número de estaciones. Los equipos fueron adquiridos entre 2010 y 2013 y costaron 23 millones y ocho millones 967 mil pesos, respectivamente.

Algunos se ubicaban en las estaciones Zócalo, específicamente en el acceso colindante a la Catedral; en Bellas Artes, en los torniquetes con dirección a Taxqueña; en Cuatro Caminos, en el único acceso de la estación, en Balderas, la cual reabrió sus puertas en septiembre de este año y en Universidad. En cuatro años, los equipos, que buscan prevenir la comisión de delitos, fueron retirados y su ausencia pasó desapercibida entre usuarios y trabajadores; 31.9 millones de pesos fue el costo de los 39 equipos que fueron colocados en diversas estaciones.

Sumado a esta decisión, ha quedado demostrado que los agentes de las policías: Auxiliar y Bancaria e Industrial de la Secretaría de Seguridad, tampoco cuentan con la capacitación necesaria para enfrentar estas crisis y solo hacen “presencia”.


EVIDENCIAS

Nos cuentan que quienes andan emberrinchados en el Congreso capitalino son los diputados de Morena, hasta conferencias le hacen a la Presidenta de la Comisión de Planeación del Desarrollo, Olivia Garza. Resulta que la legisladora anunció una serie de foros de cara a la elaboración de los planes de desarrollo de la Ciudad de México. Eso no les gustó a los morenistas, en especial a Víctor Hugo Romo, quien se quejó de que no fue invitado y criticó que medios de comunicación hayan considerado estos foros como parte del Congreso y no solo de la presidenta de la Comisión.

Sin embargo, el resultado no fue el esperado por los morenistas, pues los reporteros les recordaron que Alejandro Encinas anunció que los instrumentos de planeación ya se estaban elaborando pero sin consulta a la ciudadanía, en resumen: el gobierno de Clara Brugada resultó más criticado que la misma diputada a quien querían “linchar mediáticamente” y todo porque no le perdonan que les esté marcando la agenda en la CdMx.

MAIL: gerardo.jimenez@elsoldemexico.com.mx

X: @Santomitote